Difíciles fueron los tiempos en que Ambrosio debió defender la doctrina católica, tiempos de herejías, tumultos y guerras religiosas.
Hombre de acción y de letras, al ser nombrado obispo en el año 374, se dedicó a estudiar con profundidad el dogma cristiano. Fue en Occidente el defensor de la doctrina de la Iglesia frente al arrianismo, y era tal el prestigio del que gozaba, que participó en numerosos concilios, invitado especialmente.
A través de sus escritos, Ambrosio persigue fines prácticos y morales, penetrando en el sentido místico de la Escritura para guiar al lector en la comprensión de la doctrina y motivar una respuesta de fe consciente y madura.
Editorial LUMEN ofrece al lector los escritos de san Ambrosio sobre Los sacramentos y Los misterios, en un intento por difundir la riqueza espiritual y doctrinal de uno de los grandes Padres de la Iglesia.